Piedra tipo mármol: con una mezcla entre caliza y calcita, su acabado satinado logra una superficie tersa, suave y sembirllante. Sus vetas pronunciadas en tonalidades azules, blancas y terra, realzan la belleza de los espacios y crea un ambiente coloridos, vibrantes y enérgico. Ideales para instalar en las paredes de las zona húmedas.